sábado, 13 de octubre de 2018

Cuerpos...

Los besos comenzaron suaves, ellos sabían que tenían que contenerse para lo que venía... Las miradas a oscuras trataban de definir esos dos cuerpos que separados querían ser uno solo... Quién dijo que fundirse en uno solo era un imposible...

Las manos inquietas lo querían todo, pero sabían que la mesura era su mejor aliada... Las yemas recorrían las cejas una y otra vez; los labios se mordían, lo suficiente para sentir sin despertar del sueño... Las sonrisas venían por dentro, de cuando en cuando se asomaban...

Labios curiosos estremecían los cuerpos a su paso desmedido; lenguas se paseaban por el pecho, el costado, el abdomen, deseando llegar al punto máximo, suave, sin prisa...

... Todo era intenso, pero sucedía con la calma más presente... Algo le decía a esos cuerpos que tenían que sentir para poder vivir... Algo muy adentro los empujaba a entregarlo todo en cada mirada, en cada caricia, en cada beso...

El oxígeno escaseaba mientras la cadencia de los cuerpos dejaba ver la conexión máxima, la energía plena, el momento perfecto... Ambos cuerpos se estremecían, luchaban, sentían...

Al terminar, ahí, los dos cuerpos echados inmóviles nunca fueron los mismos... Quizá el amor les contó un secreto, quizá ellos decidieron escucharlo..

domingo, 7 de octubre de 2018

Blanco...

Hoy llegas con esa luz escondida detrás de esos ojos serenos que me dicen mil cosas sin necesidad de preguntarles... Llegas con esa calma y aún así logras revolcarme el alma entre letras, fotos y canciones... Blanco alegría abrazado a la melancolía, blanco semilla entre tanta sequía...

Blanco limpio y profundo, blanco cálido que me da tranquilidad... Blanco luz, blanco bonito... Déjame pintar el lienzo virgen que hoy la vida nos presenta; lienzo blanco entre tanto mural cargado de momentos que alguna vez fueron...

Claro como el agua, blanco como el color de las nubes en el cielo... Hoy mi corazón contrariado se pinta de blanco para sentir más fuerte... Hoy quiero ser el dueño de tu mirada y tus sonrisas, de tus labios suaves y calmados, de esas manos que ayer me sujetaban para no dejarme ir...

Dile a tu corazón que no deje de latir por mí; dile a tu memoria que no me he ido, que no me olvide... Y ahora, mientras todo sigue blanco, sigue moviéndome las entrañas para hacerme sentir vivo...

Ojalá la vida nos una en sueños, para que en las noches podamos abrazarnos hasta quedarnos dormidos... Ojalá el reloj se detenga cuando las circunstancias nos acerquen... Ojalá tus ojos nunca dejen de encontrarme...

Blanco. Luz. 

domingo, 16 de septiembre de 2018

El jardín...

Dicen que el jardín del vecino siempre será más verde que el propio, a lo mejor el inconformismo hace su reaparición y se presenta como ese viejo amigo consejero que siempre tomó las decisiones en el pasado y que nunca me dejó pensar bien...

Mi decisión raya con la obsesión de hacerle caso a este corazón que siempre se mostró indómito pero que volvió a enamorarse de la manera más ingenua, tratando de ignorar que en esta historia que me inventé solo estamos mi deseo y yo, mis ganas y yo, mi vacío y yo...

En este nuevo juego lo puse todo, tomé el riesgo y siento que estoy perdiendo por algo que ahora parece un capricho... No sé si en realidad esto se nos cayó de las manos o simplemente yo decidí abrirlas para dejarlo ir...

Ahora, en esta esquina, ninguno de los dos caminos parece posible... El inconformismo trajo a su amiga soledad y juntos me abrazan en un intercambio doloroso que me dejará maltrecho por más tiempo del que ahora creo soportar...

Ahora que lo pienso, fui yo el que decidió cruzar la cerca con el ánimo de tener un poco de la belleza de aquel jardín que yo creía más verde; fui yo el que arriesgó amor por novedad creyendo ser correspondido; fui yo el que perdió...

domingo, 9 de septiembre de 2018

12:52

El frío ya se sentía en las manos y el calor en la cara. El pecho palpitaba más que de costumbre y el momento del encuentro se hacía cada vez más inminente. La emoción de conocerse era más fuerte, sin embargo el anonimato de la pantalla siempre ofreció comodidad, pero nunca certezas...

La decisión ya estaba tomada y sin duda alguna el sueño se había puesto en juego, la realidad podría lacerarlo con su implacable presencia y todo habría quedado en largas horas de anhelos...

Las 12:52 se acercaban sin demora, la ansiedad de una mirada real y de un abrazo ya bastante soñado, amenazaba con quebrantar la poca mesura que quedaba en el momento. Ambos lo sentían...

Nunca pensaron en el riesgo de la corporalidad, nunca creyeron que materializar podría ser sinónimo de destruir, nunca fue una posibilidad...

El reloj parecía más cómplice que enemigo y conforme llegaban sus minutos, la virtualidad comenzaba a desaparecer y la realidad a tomar forma... Sus ojos atravesaron el lugar, la comisura de los labios se contrajo y los pómulos subieron... Era real, eran reales...

El abrazo terminó de comprobar lo que el teclado una y otra vez había insinuado, en ese momento todo fue silencio, todo fue alegría... Eran felices, o al menos eso creían, lo que no sabían es que precisamente ese momento fue el principio y el fin... Después de esa noche no volverían a verse, porque así es la vida, porque así son las cosas, porque lo perfecto no existe...